Cavendish volvió a ser el más fuerte en una llegada del Tour, esta vez en la meta de Brive-la-Gaillarde, tras 222,5 kilómetros, en busca de recuperar el trono al mejor velocista, que el eslovaco Peter Sagan (Liquigas) y el alemán André Greipel (Lotto) le discuten en la carrera francesa.
Los expertos en fugas, sabedores que hoy era su última oportunidad, mañana contrarreloj y el domingo se espera el tradicional esprint en los Campos Elíseos,
exprimieron sus fuerzas para llevarse la etapa.
Esto provocó una constante lucha por 'cazar' la escapada del día, que al final se hizo, integrada por dieciséis buenos rodadores, tras casi setenta kilómetros.
Mañana será el último asalto antes de la llegada a París. ¿Qué cabe esperar de estos 53.5 km de recorrido más bien llano, excepto el inicio, marcado por las colinas típicas de la región de Perche? Personalmente, supongo que habrá diferencias de entre dos y tres minutos en los tiempos de los líderes. Después de tres semanas de carrera, 53.5 km cronometrados se hará largo. También para el portador del maillot amarillo, que seguramente llegue detrás de especialistas como Martín o Cancellara.
De cara a la clasificación general, Wiggins quien por 12 días ha portado el maillot amarillo, se perfila como virtual ganador de la edición 2012 del Tour, aunque debe defender 2'05'' sobre su coequipero Froome que en la montaña se vio muy superior al líder y 2'41'' sobre el italiano Nibali que tampoco canta mal las rancheras.
Así queda la general después de 18 etapas:
Este dato es para orgullo y consuelo de nuestros amigos franceses en el Toston Bike... ¡Vive la France! (aunque los ingleses les hayan partido su madre).
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